Archivos Mensuales: abril 2011

Primeros avances en la educación

Desde la época de la colonia hasta nuestros días, la educación ha sido una de las grandes preocupaciones de nuestros gobiernos. Aunque por muchos años estuvo en el control de órdenes religiosas, el Estado intervenía de una u otra forma y es este mismo  el que durante el siglo XIX decide tomar un rol más importante y crea el Instituto Pedagógico en  1889 para formar profesores competentes que enseñar en la educación secundaria.

Las primeras escuelas durante la colonia en Chile, pertenecían en su mayoría a conventos, ya que la monarquía Española consideraba la educación popular como una obra caritativa que debían asumir las ordenes religiones, es por esto, que todo sacerdote tenía derecho a enseñar. En cambio, a los laicos, se les exigía una licencia del Cabildo y de la autoridad eclesiástica, además debían cumplir con otros requisitos como limpieza de sangre, o sea, no ser hijos de uniones ilegales, no tener cuentas pendientes con la justicia ni el tribunal del Santo Oficio, ni haber ejercido oficios serviles,  esto quiere decir no haber realizado laborales manuales que se consideran de indios, negros, mulatos o zambos.

Los métodos de enseñanza en esta época, era principalmente de memoria. La disciplina era estricta y los castigos eran tanto corporales, como azotes en el torso desnudo o trasero o una especie de raqueta que utilizaban los profesores para pegarles en las manos no solo eran corporales, como también se le humillaba al que haya cometido una falta públicamente.

Uno de los casos más evidentes de la intervención del Estado en la educación, fue la Real Cédula de 11 de mayo de 1697 de Carlos II, ordenando la creación del Colegio de Naturales de Chillán, con un presupuesto de $ 4.000 anuales y la creación de la Academia Regia Carolina Chilensis, conocida como Convictorio Carolino, en reemplazo del jesuítico Convictorio de San Francisco Javier. El primer rector del Carolino, Ambrosio Cerdán y Portero fue nombrado por el representante del Rey, el gobernador Jauregui.

Desde la primera Junta Nacional de Gobierno a inicios del siglo XX

En 1813 la junta de gobierno situó y estableció que en cada ciudad, pueblo o villa con más de 50 habitantes debía haber al menos una escuela gratuita costeada por los propios lugareños. De igual manera se funda el Instituto Nacional con el objetivo de superación de lo que se llamaba el “oscurantismo colonial”, para que así nuestro país tuviese grandes y aperturas de posibilidades a través de la enseñanza, este se llamó “Reglamento para Maestros de Primera Letra”. Posteriormente durante el gobierno de O’Higgins se dictó un Reglamento Interno para las Escuelas, en lazado principalmente al aspecto social y nacional, promoviendo así las obligaciones como ciudadanos y también sus derechos.

En 1821 de autorizó el funcionamiento de la llamada Sociedad de Amigos, presidida por Manuel Blanco Encalada, esta tenía como fin la fundación de escuelas y la instrucción de la educación popular. Luego con la constitución de 1822 se hace un mayor énfasis en expandir la educación dentro y fuera de Santiago, a continuación en la constitución de 1828 se restituye la Escuela Normal Lancasteriana, nombrándose así una comisión visitadora de escuelas para Santiago, creándose así el cargo de  Inspector General de Instrucción Primaria.

Luego del éxito de Portales (1831) culmina la subvención de los establecimientos particulares y se impone el hecho de validar la enseñanza del individuo mediante una seria de exámenes en el Instituto Nacional. En la constitución de 1833 la educación pública debe ser promovida por el gobierno, o en otras palabras, la municipalidad debe ocuparse de ella y para que esto de resultado se crea La Superintendencia, así se realizará una mayor inspección y dirección de la enseñanza nacional. En consecuencia las escuelas se fraccionaron en tres dependencias; las públicas, municipales y conventuales. La cantidad de escuelas públicas iban en aumento, mientras que aún la enseñanza para la mujer no era completa. Por lo demás al admitir la existencia de las escuelas particulares hay un reconocimiento explícito a libertad de enseñanza.

La nueva constitución consagra el “Estado docente” debido a las acciones tomadas preferentemente del estado en el área de la educación, enunciada por razón de la creación en 1837 del Ministerio de Instrucción Pública, integrado a la Justicia.

En 1842 se crea la Universidad de Chile buscando desarrollar las áreas del conocimiento postergadas por la rígida estructura existentes hasta ese entonces.

En 1856 se crea en Santiago la Sociedad de Instrucción Primaria, en donde Manuel Montt contribuyó con importantes cambios a la educación; en 1852 y 1854 las áreas más débiles era la calidad de la docencia y la precaria administración del sistema existente, por todo lo antes dicho se crea  la Ley Orgánica de Instrucción Primaria el 24 de noviembre de 1860, en donde se completa la antigua libertad de enseñanza y la gratuidad de la educación, la cual el Estado debe asumir por primera vez su papel en la dirección principal de la Educación primaria, para así garantizar esta característica de gratuidad de la enseñanza primaria, para todos los individuos, a cargo del gasto fiscal estatal y municipal. Como consecuencia esto condujo a un aumento en el número de escuelas, matriculas y de asistencia, no obstante estas particularidades comenzarán a decaer por efecto de las guerras y las crisis vividas por nuestro país. En esta ley, la instrucción primaria queda desconectada de la secundaria, debido a que la primera es dependiente del ministerio y la segunda del consejo universitario.

Ya para 1871 las escuelas elementales se dividen en urbanas y rurales; y las escuelas particulares empiezan a ir en aumento. Igualmente de importante, en 1881  las escuelas alternadas se transforman a escuelas mixtas.

A finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, la educación se vuelca en una discusión sobra la gratuidad y obligatoriedad.

En resumidas cuentas la educación primaria pretendía impartir un conocimiento elemental común a toda la población. Conocimientos que incluían leer y escribir, nociones elementales de matemáticas y doctrina y moral cristianas.

Desde 1910 hasta el golpe de Estado

A partir de 1910 se inicia un debate a nivel nacional con respecto a la educación, principalmente en lo relacionado a la obligatoriedad, la gratuidad y la calidad que esta tenía. Los liberales están de acuerdo con que se cumplan estos puntos, pero gente proveniente de sectores más conservadores no le encuentran mayor sentido a lo que se propone, ya que al ser campesino no necesitaba mayor educación, porque renegarían de sus orígenes y dejarían en la posición que les ha sido designada de manera divina, como propuso el obispo Joaquín Larraín Gandarillas.

En 1917, el profesor Darío Salas publica “El Problema Nacional”, una denuncia sobre la mediocridad de la educación chilena. Como consecuencia de este texto, se dicta la Ley N° 3654 de 1920, que hace obligatoria la educación primaria, la que sería de seis años para el sector urbano y de cuatro para el rural. La obligatoriedad queda absolutamente establecida a nivel legal cuando la Constitución de 1925 señala que, además de asegurar la libertad de enseñanza a todos los habitantes de la República, la educación pública es atención preferente del Estado. También se deja determinado que la educación será gratuita y será para ambos sexos.

También se generó un debate en torno a lo competente que es la educación secundaria en esos años, ya que muchos docentes la consideraban desconectada de la realidad nacional y de la educación primaria,  sin educación cívica ni social, muy ligada al tipo de formación alemana, por lo que la Sociedad Nacional de Profesores discutió en torno a un congreso, en 1912, tratando de generar ideas y soluciones al respecto. Los cambios que sugirieron no encontraron eco en las autoridades, pero las discusiones sobre las causas de la crisis de la educación secundaria y las sugerencias de solución constituyeron un semillero de ideas para los movimientos reformistas que se dieron durante el siglo XX.

En 1928 se crearon las escuelas fiscales de experimentación, las que se dividían en amplias o restringidas. Las escuelas de experimentación restringida seguían la lógica de importación de conocimientos y experiencias extranjeras, ya que en ellas se ensayarían modelos pedagógicos creados y aplicados exitosamente en el exterior. En cambio, las escuelas de experimentación amplia, aunque también se apropiarían de enfoques foráneos, harían estudios comparativos, ensayarían formas nuevas y pondrían a prueba combinaciones de los modelos. Todo ello implicaba una disposición a generar un nuevo conocimiento, congruente además con las características de los estudiantes chilenos y los requerimientos del país.

En julio de 1930 se realizó la Asamblea de Rectores de Liceos, donde nuevamente se discutió la educación secundaria. Una de las propuestas fue introducir elementos de la experimentación, que consiste en que los individuos construyen conocimiento, adquieren destrezas e incrementan los valores a partir de la experiencia directa.  En 1932, el Ministerio de Educación creó el Liceo Manuel de Salas. En 1945, el ministerio nombró una comisión para estudiar y proponer un plan de renovación de la educación secundaria.  A partir de la experiencia del Liceo Manuel de Salas, la comisión planteó los principios que debía tener la educación secundaria: participación, trabajos en grupo, coeducación entre profesores, apoderados y alumnos y la centralidad del alumno como autor de su proceso de desarrollo. El plan de renovación gradual contenía tres etapas. La primera incluiría a los liceos “experimentales” Manuel de Salas, Darío Salas, Gabriela Mistral y el de Niñas de Concepción. La segunda etapa integraría a los liceos “renovados” de Niñas N° 6 de Santiago, el de Quilpué, el Juan Antonio Ríos y otros más. La tercera que etapa, en la que se extendería el cambio a todos los establecimientos secundarios “tradicionales” del país, nunca se llevó a cabo.

Pedro Aguirre Cerda, en su texto “Sobre la instrucción secundaria” (1941) señala los principios centrales de la educación para esos años: “Los  principios fundamentales del método  hoi empleado  pueden,  pues, reducirse  a  los siguientes: 1.-  hacer que  toda  enseñanza  sea un   estudio por  parte  del  niño  i que  él mismo  descubra  las  verdades  que  ha  de  aprender;  2.-  la enseñanza  debe  ser  al  principio  concreta  i después  abstracta; se  estudiarán primeramente  los  hechos aisladamente i  se  establecen en  seguida  sus  relaciones de  semejanzas y diferencias; 3.-  el método empleado  debe  ser el  inductivo, que es  el  que presenta los fenómenos con  mas  claridad i  que hace penetrarse mejor de los  conocimientos, sin  conducir a errores; si  ocasionalmente se recurre al deductivo, es   sólo  para comprobar lo  descubierto por aquél;  4.- el  estudio debe ser concéntrico  en los  primeros años i  sistemático en  los últimos”.

En 1961 se crea el Plan de integración educacional de Arica, que consistía en una nueva estructura del sistema escolar que promovería la atención oportuna y eficiente de las necesidades culturales de la zona y del país, integrado al servicio de la comunidad y en coordinación con las instituciones sociales. Con un inicio paulatino, llegó a estructurarse en tres niveles: parvulario, primario y medio (este último dividido en ciclo medio común y ciclo medio diferenciado) contemplando además, servicios y formas de enseñanzas especiales. Este verdadero laboratorio pedagógico planteó una nueva concepción filosófica con objetivos muy bien definidos, permitió un alto índice de retención escolar, la aplicación de una modalidad especial de evaluaciones y promociones, la implementación de cursos de capacitación para el trabajo y el aumento de las construcciones escolares. Los docentes lograron elaborar y aplicar programas integrados, desarrollar métodos activos, técnicos, didácticos, audiovisuales y psicopedagógicos que favorecieron el proceso de enseñanza y aprendizaje.

En diciembre de 1962 se crea la Comisión de Planeamiento integral de la educación chilena. Uno de sus planteamientos señala que la educación es atención preferente del Estado y ello supone extender y mejorar constantemente los servicios educativos de la nación, de tal modo que se asegure un mínimo cada vez más alto de educación a todos los ciudadanos, iguales posibilidades de acceder al nivel y tipo de educación que esté más de acuerdo con las capacidades de cada uno y con las necesidades y recursos nacionales. Para ello, uno de objetivos de la Comisión será estudiar soluciones, dentro de un plan integrado, a los problemas administrativos, pedagógicos y económicos que plantean la extensión y el mejoramiento de las actividades educacionales nacionales.

En 1965, se produjo una gran reforma a la educación. Esta reforma planteaba igualdad de oportunidades, responsabilidad socio-cultural y formación para el futuro. El presidente Eduardo Frei Montalva se propuso modernizar y democratizar la educación para transformarla en la herramienta fundamental del programa de desarrollo social, cultural, económico y político de su gobierno. La enseñanza se dividió en tres: educación parvulario, educación básica de ocho años y educación media de cuatro años, dividida en dos: dos años de enseñanza común y dos años de enseñanza científico-humanista o técnico profesional. También, era una reforma cualitativa, ya que pretendía la elaboración de nuevos planes y programas de estudio así como también la selección de métodos activos de aprendizaje, siguiendo la línea de los liceos experimentales y de el Plan de integración educacional de Arica. Con la reforma se quería aumentar las matrículas, tener dentro del sistema educacional a 220.000 alumnos que en 1965 no estaban. Dentro de esta reforma, el mayor cambio se produjo en la educación secundaria, ya que su matricula creció en un 20% anual.

Durante el gobierno de Allende, se planteó la Escuela Nacional Unificada (ENU), un proyecto de reforma al sistema educativo de Chile. El proyecto de ley y decretos ministeriales de la ENU planteaba una reforma radical al sistema de enseñanza chileno, con el objetivo de convertir a la educación en un medio de transformaciones de la estructura socio-económica del país.

El objetivo de la ENU era que escuela y comunidad tuvieran un vínculo cercano y que se complementaran entre sí, una mejor coordinación entre los diferentes niveles educativos, un mayor presupuesto dedicado a este ámbito. La ENU concretamente significaba la integración y consolidación, en un único tipo de establecimiento (Unidades Escolares o Complejos Educacionales), de la educación parvularia, básica y media identificándose respectivamente como Educación Parvularia, Educación General y Politécnica. Esta última modalidad tendría importantes rasgos de diferenciación en sus 4 años. La administración estaría a cargo de consejos integrados por la dirección del establecimiento, profesores, personal auxiliar o paradocente y apoderados.

En el gobierno de Allende, la educación secundaria tuvo un aumento considerable de alumnos, se incentivó la alfabetización, principalmente en los sectores campesinos y obreros, se otorgaron matrícula, útiles escolares, desayunos y almuerzos gratuitos a los niños de la educación básica. El proyecto de la ENU llegó a su fin con el golpe militar de 1973.

Dictadura Militar hasta implantación democracia

Durante la mitad de la década de los 70’s y los 80’s Chile se encontraba inmerso bajo el régimen militar de Augusto Pinochet, gobierno que tras la dictadura del 11 de septiembre de 1973 llegó al poder. Tras la implantación del modelo económico neoliberal en Chile, una serie de reformas de este tipo de corte sucedieron en nuestro país. En el marco de este régimen político autoritario a través de una reforma estructural radical descentralizó su administración introduciendo instrumentos de financiamiento basados en el subsidio a la demanda. Estimulando la creación y el crecimiento de colegios privados con financiamiento estatal. A través de un esquema de vouchers que admitió la participación privada en la provisión de educación, financiada con recursos públicos, solo permitieron un importante incremento de la cobertura educacional, produciéndose un aumento significativo en el número de escuelas, mayoritariamente de gestión privada. O sea, se mejoró el acceso a la educación. Sin embargo, no se notaron grandes avances en calidad y equidad de la educación, ni siquiera con la llegada de la Democracia en 1990.

Durante estas dos primeras décadas, anteriores a las reformas de los 80’s, era de gran dificultad tener una visión de la calidad de la enseñanza ya que al ser el Ministerio de educación el responsable de educar y llevar el control de los distintos establecimientos educacionales había una baja calidad educacional, baja eficiencia reflejada en altos porcentajes de deserción y repetición escolar( administradores de los colegios no tenían poder para atraer o retener a los estudiantes), bajos sueldos de los profesores, supervisión ineficiente de los colegios, programas de estudios rígidos e inflexibles y con una mínima participación de la comunidad en los asuntos escolares. Además que no existía un sistema de evaluación que brindara  un panorama de los establecimientos educacionales con mayor necesidad de apoyo, por lo que las deficiencias  de la educación eran claras.

De los dos grandes aspectos que se centraron las distintas políticas educacionales de la década de los 80’s en nuestro país, destacamos:

–           Descentralización, privatización o municipalización: Permitieron diversificar la oferta académica, tanto de administración como curriculares. De la administración se configuraron 3 tipos de establecimientos: Municipales, particulares subvencionados, particulares pagados. De esta manera, se fomentó la creación de un sistema privado, financiado igualmente por el Estado y se abrió la posibilidad que particulares que estuviesen interesados en la educación, se convirtieran en “sostenedores”. Estos podían crear un establecimiento siempre y cuando cumplieran lo que determinara el Estado y a la vez estos “sostenedores” gozaban de mayores libertades administrativas de los colegios que los municipios, otorgándoles un financiamiento por número de alumnos y asistencia con el fin de que al competir por alumnos, los establecimientos mejorarían su calidad de educación. A sí mismo, contaran con una mayor libertad en los planes electivos durante la media lo que suponía que generaría una mayor diversidad de ofertas y flexibilidad del sistema. Esperando satisfacer las distintas necesidades de los estudiantes. Sin embargo, esta flexibilidad nunca se concretizó agudizando las diferencias en cuanto calidad educativa y segmentación social.

–           Intentos de cambio en la estructura y currículo:  En 1981 se dictó un decreto que regularía la educación media en su modalidad de  humanista-científica, estableciendo que tendría dos ciclos; el primero de educación general y el segundo ciclo que fuera diversificado con el fin de que el estudiante se inclinara hacia una de las dos modalidades orientada a la Universidad. Por el contrario, los establecimientos educacionales  técnico- profesional estaban orientados al trabajo.

De esta forma, se empezó a dar importantes entregas de recursos fiscales a entes privados con fines de lucros, sin una mayor regulación de esos dineros. En este proceso, las condiciones contractuales de los docentes se asimilaron a las del sector privado, quedando enteramente liberadas al mercado. De igual manera, no puede desconocerse que durante el régimen militar la máxima autoridad municipal era designada por el gobierno central, por lo que, la municipalización significo un mayor control reflejado en un autoritarismo, arbitrariedad y perdida de autonomía profesional.

Es así,como durante todo este proceso, se forma un cambio importante en el rol de Estado en la Educación. Pasa de un Estado Benefactor a un Estado Subsidiario, cuya resultado fueron y siguen siendo una enorme inequidad en el sistema educativo.

A modo de terminar este capítulo, cabe destacar que el gobierno no dejó todo al azar, sino que estas reformas quedaron consagradas por la Constitución Política de Chile del año 1980, en la ley  nº 18.962 Orgánica Constitucional de Enseñanza, siendo publicada en el diario oficial el 10 de marzo de 1990, en el último día del Régimen Militar.

Desde inicios de la década de los 90’s hasta Sebastian Piñera

Poco antes del cambio de cambio, en marzo de 1990 se promulgó por parta de la junta de Gobierno  la Loce (Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza). Mandato constitucional, que tuvo por esencia fijar los requisitos mínimos que deberán cumplir los niveles de enseñanza básica y enseñanza media, regular el deber del Estado de velar por su cumplimiento, y normar el proceso de reconocimiento oficial de los establecimientos educacionales de todo nivel además de  la libertad que se le brindo a que cualquier persona pudiese crear una institución educacional si cumplía con ciertos requisitos mínimos.

Entre las múltiples modificaciones que ha vivido esta Ley desde su creación, destaca en 1997 el establecimiento de normas para la aplicación de la jornada escolar completa diurna en los establecimientos educacionales, en 2000 que el embarazo y la maternidad no constituirán impedimentos para ingresar y permanecer en los establecimientos educacionales de cualquier nivel y en el 2005 agregó una ley que restableció la exclusividad universitaria a la carrera de Trabajo Social.

Tras divulgarse estas leyes y el disgusto de los estudiantes por el negocio creado de la Educación, es que en el 2006 estos comenzaron a movilizarse para la derogación de esta ley, gratitud de la PSU, pase escolar gratuito, entre otros reclamos. Conocida como la Revolución Pinguina, realizada por estudiantes secundarios, pero con amplio apoyo de profesores y universitarios, que especificaremos más adelante, durante el gobierno de Michelle Bachelet.

Tras 17 años de dictadura, el presidente Patricio Aylwin es elegido democráticamente. La educación en nuestro país a inicios de su mandato exhibía grandes avances en la cobertura de la escolaridad promedio de los Chilenos y la  reducción del analfabetismo. En contraste, el sistema educativo mostraba graves falencias en cuanto a la calidad de la educación y equidad de su distribución. A si mismo, existían graves problemas de gestión, por la situación de los profesores y los niveles de financiamiento de la educación se habían deteriorado bastante en la época de los 80’s

Durante este periodo, la descentralización impuesta durante la dictadura, se encontraba a medio camino. Se había descentralizado administrativamente, pero no se había brindado el apoyo a los municipios para gestionar la educación. Tampoco se había avanzado en una descentralización técnica que permitiese realizar propuestas pedagógicas distintas, para niños con culturas diferentes.

El primero de julio de 1991, se promulgó el Estatuto de los profesionales de la educación, que tenia como fin el redefinir el régimen laboral de los profesores, traspasándolos desde el cogido del trabajo, que rige las actividades privadas, a un estatuto especial, que instaura  una regulación nacional de sus condiciones de empleo. Este estatuto se aplica a los profesores de los municipios, pero fijo una remuneración básica mínima nacional que obliga también a los privados.

Gobierno de Eduardo Ruiz-Tagle(1994-2000)

En el periodo presidencial de Eduardo Frei Ruiz-Tagle se estableció la Comisión Nacional para la Modernización de la Educación, la que consistía en desarrollar un diagnóstico del sistema educativo, para luego plantear formas de acción en un corto, mediano y largo plazo. En consecuencia, en el informe de la comisión anteriormente nombrada, se formaron las bases del proyecto y las políticas de modernización de la educación en los siguientes términos:

  • Suministrar una formación de calidad para todos los individuos
  • Reformar y diversificar la educación media
  • Conceder mayor independencia y flexibilidad de gestión y más información pública sobre sus resultados, para así obtener escuelas más efectivas
  • Acrecentar  la inversión educacional, ya sea pública como privada, como también promover la modernización educacional.

 Luego el Gobierno define la educación como la principal tarea del presente y según el mismo Presidente de aquel entonces, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, “el país está consciente, y mi gobierno convencido, de que la educación es la base para conseguir la igualdad de oportunidades, la equidad y una mayor movilidad social, Así se romperá el círculo de la pobreza, se desarrollará la productividad y competitividad de nuestra economía y se estimulará el desarrollo de una cultura democrática y solidaria, imbuida en los valores de la solidaridad y la responsabilidad” (1996); así mismo señaló que “la reforma educacional apunta, sobre todo, a mejorar la calidad de la enseñanza, en donde lo esencial es el cultivo del aprender a aprender” (1997): y, aparte, ha descrito que “el mundo del mañana pertenece al conocimiento. De ahí que una educación de calidad, abierta con igualdad a todos, sea la clave del futuro» (1998).

          En las principales y específicas definiciones del Sr, Ministro de Educación, Don José Pablo Arellano, en el discurso de inauguración del año escolar de 1998, determinó que la Reforma educacional tiene cuatro áreas:

  • Reforma curricular, o en otras palabras, los saberes y competencias para la actualidad y el futuro, y nuevos modelos de aprender y enseñar
  • Renovación pedagógica; potenciada con mayor y mejor material y recursos.

Tal política educacional formada en el proceso de reforma, tiene como puntos esenciales la descentralización y autonomía de los establecimientos educacionales. De esta forma se busca que cada centro educativo, según su realidad social y contexto en donde se desarrollen, fabrique planes de trabajo y proyectos educativos adecuados. Sin embargo  lo anterior, el Ministerio de Educación de nuestro país, concordando a lo establecido en la Ley N° 18.692, o sea, la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, implantó los Objetivos Fundamentales y Contenidos Mínimos Obligatorios para la educación básica y media. Con lo anteriormente dicho se intenta dar una característica nacional a la educación chilena, sin embargo esto posee un marco de flexibilidad, que admite a cada establecimiento educacional potenciar los proyectos educativos de cada entidad según sus orientaciones.

Al mismo tiempo, como una manera novedosa en la organización curricular chilena, se genera la necesidad de afrontar la formación integral de los estudiantes, generalizando y atravesando el curriculum de cada una de las materias individuales con Objetivos Transversales, que poseen un carácter comprensivo y general enfocados el desempeño individual y a la conducta moral y social de los alumnos.

 Además, como una forma inédita en la organización curricular chilena, se establece la necesidad de abordar la formación integral de los estudiantes, atravesando el currículum de cada una de las asignaturas individuales con los Objetivos Transversales, que tienen «un carácter comprensivo y general, orientados al desarrollo personal y a la conducta moral y social de los alumnos». A través de los objetivos antes dichos, el sistema educacional pretende  estimular el progreso pleno de todos los individuos, promoviendo así el lado ético personal de los alumnos, el conocimiento desarrollado de la sociedad y la inclusión activa y creativa en esta misma. La formación de los objetivos transversales se instauran en los niveles básicos (primario) y medio (secundario), de esta forma se convierten en acciones y preocupaciones estables durante toda la vida escolar.

En el aspecto de la enseñanza básica, se estipuló que: las intención de transversalización debe fortalecer la formación ética de los alumnos; para que esto ayude a orientar el proceso de crecimiento y auto determinación personal; y a orientar la manera en que los individuos mantienen una dinámica social con sus pares o con el contexto en el cual estén insertos.

En suma de lo antes dicho, los desafíos que se plantearon en este gobierno, específicamente en la reforma educacional son de gran relevancia, y en específico los docentes juegan un papel primordial en el desarrollo e implantación de este cambio por medio de la definición de los proyectos educativos en cada establecimiento educacional. En esta perspectiva es algo indiscutible que los profesores deben desarrollarse, perfeccionarse y prepararse, no obstante paralelamente, no cabe duda que es necesario optar o cambiar ciertos aspectos tan relevantes como la remuneración de los profesores, que hasta nuestros días no se ha tomado el peso de la importancia a nivel social que tienen los docentes.

Gobierno de Ricardo Lagos Escobar( 2000-2006)

Este gobierno se interesó especialmente por la economía del país, debido a que principalmente era uno de los agentes que no permitían a nuestro país un desarrollo creciente y permanente.

Para lo anteriormente dicho se pensó en un factor primordial, la educación, ya que en este gobierno se consideraba que para poder lograr un desarrollo económico y social óptimo, Chile requería culturizarse y prepararse cognitivamente en todos los aspectos posibles.

El 2003 queda marcado con un hecho en el área de la educación: esto consiste en que la enseñanza se vuelve obligatoria y gratuita hasta los 12 años de escolarización, aseverando la educación de las personas hasta terminar la enseñanza media.

Con esta medida aumentarían los recursos para optimizar la educación, o sea, invertir en las áreas en donde existen mayores carencias y necesidades, por ejemplo en niños que provienen de hogares pobres, familias con oportunidades insuficientes, etc.

Refiriéndonos a lo antes puesto, una mayor cantidad de establecimientos educacionales adoptan la jornada escolar completa, principalmente en aquellos colegios que necesitaban mejorar la educación implementando instancias de reforzamiento y capacitación.

Una solución que otorgó el gobierno de Lagos al problema educacional fue el reemplazo de la prueba de aptitud académica por la prueba de selección universitaria (PSU), a partir del 2003 esta era una medida transitoria. Esta prueba permitiría promover las oportunidades, paralelamente en este mismo aspecto, se inicia un proceso de otorgamiento de créditos para los alumnos que pertenezcan a las universidades del consejo de rectores.

Debido que para el presidente de nuestro país en ese entonces, Don Ricardo Lagos, el desarrollo era un tema primordial, se comienza a desarrollar un proceso de inclusión en el ambiente de la tecnología, para llevar a cabo esto crean medidas como las siguientes:

  • 30 alumnos por computador
  • 3 millones de escolares debían tener acceso a internet a través de un programa llamado “enlaces”
  • En el año 2001 se sumaron a la red interescolar 927 escuelas, de las cuales 343 son establecimientos rurales
  • El 90% de los chilenos tiene acceso a internet a través de sus entidades educacionales
  • Capacitación de 20.000 docentes para hacer uso de las tecnologías
  • Finalmente son 78.000 los docentes capacitados para el uso adecuado de las tecnologías antes dichas.

Para concluir, uno de los hitos que marco e identificó al gobierno de Ricardo Lagos, pero sobre todo a los profesores, fue la implementación de la evaluación docente suscrita e implementada por el Ministerio de Educación, la Asociación Chilena de Municipalidades y el Colegio de Profesores de Chile.


Gobierno de Michelle Bachelet( 2006- 2010)

A comienzos de su gobierno, la presidenta se vio enfrentada a la llamada “Revolución Pingüina”, en la que los secundarios, principalmente, pero con el apoyo de los estudiantes universitarios, profesores y trabajadores, exigían la derogación de la LOCE, así como también que el transporte para los escolares y que la rendición de la PSU fuese gratuita, que hubiese un estudio de la jornada escolar completa y que se aplicase la des-municipalización de la educación. Producto de las movilizaciones, que se estima convocaron a 600.000 escolares para el paro nacional del día 30 de mayo, se puso al tema educativo, a la necesidad de hacer una reforma profunda en la educación chilena para que fuese de mejor calidad, más igualitaria, más accesible para todos, en el debate nacional, transformándose en el centro de atención de los medios y de la población en general por alrededor de dos meses.

Frente a esto, el gobierno decidió tomar las siguientes medidas:

  • Reorganización del Ministerio de Educación para permitir la fiscalización a través de una superintendencia.
  • Establecimiento de un Consejo Asesor Presidencial de Educación para el mejoramiento de la calidad educacional.
  • Reforma de la LOCE, consagrando el derecho de los ciudadanos a una educación de calidad e impidiendo la discriminación injustificada de alumnos por parte de los establecimientos. El Estado, además, se convertiría en garante de la calidad de la educación.
  • Medio millón de becas alimenticias.
  • Inversiones para mejoras de la infraestructura en 520 establecimientos, principalmente en casinos y baños. 1.200 establecimientos tendría mejoras inmobiliarias.
  • Becas para estudiantes de Educación Técnica Profesional durante sus prácticas laborales de 3 meses.
  • Pase escolar nacional y gratuito para los más necesitados, que podría utilizado todos los días de la semana sin límite de horario.
  • PSU gratuita para 155 mil estudiantes, pertenecientes a los 3 quintiles más pobres del país.

El 10 de Abril del 2007, se envió al Congreso un proyecto de Ley General de Educación. Este  proyecto contempla modificaciones importantes en los procesos de admisión, currículum y reconocimiento oficial de los establecimientos educacionales. Ante todo, limita la facultad que tienen los establecimientos de discriminar a sus alumnos por motivos económicos. En lo que respecta al currículum, se reduce a la educación básica en seis años y la educación media aumenta en dos años, siendo en total de 6 años. Finalmente, aumenta los requisitos que deben cumplir los responsables de un establecimiento para obtener el reconocimiento oficial del Estado. En definitiva, se aprobó la idea de legislar el proyecto de Ley General de Educación por la cámara de diputados

Profundizando el tema de la nueva Ley General de Educación, esta pretende corregir la legislación anterior (LOCE) para terminar con la discriminación y garantizar la calidad de la enseñanza. También se establece un nuevo marco regulatorio para la educación pública y privada con mayores estándares de calidad, consagrando derechos y deberes para los distintos actores del sistema educativo. Hace compatible la libertad de enseñanza con el derecho de todos y todas a una educación de calidad.

Dentro de los principales cambios que se le hicieron a ley orgánica de educación, se destacan los siguientes:

No habrá discriminación en el ingreso de los escolares a los establecimientos. Este punto tiene como fin asegurar la igualdad de oportunidades y la inclusión educativa de todos los escolares  del país, en un principio se consideraba a los niños de 6to. Básico, se extendió a los niños de 8vo. Básico.

Se creará el Consejo Nacional de Educación, que reemplazará al antiguo Consejo Superior de Educación, creado durante el régimen militar. El nuevo consejo será representativo de todos los actores del sistema escolar y estará a cargo de definir el currículo, los estándares de calidad y la evaluación de los distintos sectores educativos. En su conformación se privilegia la excelencia estableciendo altas exigencias de experiencia y de profesionalismo a sus miembros. Considera la elección de premios nacionales en distintas disciplinas aplicadas en los campos de la educación, representantes del sistema, docentes destacados o administradores. Es parte de una composición nueva, una mezcla de miembros o académicos de la educación superior con miembros del sistema escolar.

En otro punto de la reforma a la educación de Bachelet, se estableció que sólo podrán ostentar el cargo de sostenedor aquellas corporaciones municipales o fundaciones sin fines de lucro, fijándose un plazo de cuatro años para que las entidades que actualmente tienen reconocimiento oficial puedan adecuarse a las nuevas exigencias. Habrá un giro único educacional y los sostenedores deberán demostrar que están entregando una educación de calidad, junto con rendir una cuenta detallada (en el caso de los establecimientos subvencionados) del uso de los fondos públicos.

Además de lo mencionado anteriormente, la nueva ley regulará el sistema escolar, ya que entrega las  reglas para asegurar un servicio educativo de calidad para todos los niños, independiente de su condición social, económica, cultural o territorial; se establece claramente las condiciones y requisitos para la entrega del servicio educativo; se establecen los derechos y deberes para todos los actores del sistema educativo y genera condiciones para una participación activa de todos ellos en el proceso educativo; equilibra el derecho a la libertad de enseñanza y a recibir educación de calidad, ya que los padres pueden escoger y acceder sin discriminación al establecimiento de enseñanza para sus hijos y existe la libertad para abrir, organizar y mantener establecimientos educacionales.

Por otro lado, se generarán los mecanismos para contar con sistemas de evaluación de calidad de la educación de acuerdo a estándares que se definan nacionalmente. Además, se pretende  generar los apoyos técnicos y pedagógicos necesarios para mantener procesos de mejora continua en los establecimientos educaciones. Esta nueva ley promueve la transparencia del sistema educativo, exigiendo la publicación y libre acceso a la información respecto a proyectos educativos, resultados académicos, evaluaciones docentes y recursos financieros.

Actual gobierno de Sebastian Piñera

Desde el comienzo de su mandato, en marzo de 2010, su inicio fue bastante caótico. Tras el terremoto del 27 de febrero de ese mismo año, los gastos tuvieron que priorizarse a las necesidades nacionales de vivienda, alimentación, creación de colegios,etc. , aparte de existir  una gran parte de la población que lo repudiaba por sus negocios y postura política de derecha.

Con respecto a las reformas educativas que está impulsando el actual gobierno, cabe destacar las siguientes: la implementación de los llamados “Liceos de excelencia”,  que pretenden copiar el modelo del Instituto Nacional, esto es, un liceo municipal, “emblemático”, con un alto nivel de selectividad y altísima exigencia académica, cambios en la malla curricular de los escolares, como por ejemplo el aumento de las horas de lenguajes y comunicación y de matemáticas, a costa de la reducción de las horas de historia, ciencias sociales y  tecnología, la prueba Inicia para los egresados de pedagogía para evaluar sus conocimientos adquiridos y las aptitudes que tengan para la enseñanza, permitiéndole a los mejores evaluados tener mejores ingresos, mayores exigencias en la prueba SIMCE y la creación de otras pruebas, como la de inglés y educación física (para mejorar la condición física y mental de los niños, donde se detallará el estado físico de la población escolar según sexo, edad, dependencia del establecimiento y área rural o urbana, comparando los resultados a nivel nacional para ver las desigualdades existentes), además de una beca de pedagogía para los alumnos que rinden la PSU, que tienen buenos resultados en ella y la pedagogía es su primera opción, dándoles becas para cubrir completamente el arancel de la carrera, además de entregarles una suma de dinero y la posibilidad de ir al extranjero a los estudiantes más destacados. En el ámbito más administrativo, se escogerán a través de un concurso público a los directores de los colegios y se les entregará un bono a los profesores que estén en edad de jubilarse.

En relación a los liceos de excelencia, el ministro de educación Joaquín Lavín comentó al anunciar esta medida, el 21 de septiembre del 2010, lo siguiente: “Queremos que los jóvenes más motivados, más esforzados, más talentosos provenientes de familias que no tienen recursos para pagar un colegio particular o no quieren poner a sus hijos en un colegio particular, tengan una vía rápida a la movilidad social. Esos son los liceos de excelencia, la vía rápida a la movilidad social”. Estos liceos de excelencia, que en un principio serán 50, podrán, a través del apoyo financiero del Estado, financiar la ejecución de un proyecto educativo que lleve a sus alumnos a obtener resultados destacables a nivel nacional  en las mediciones SIMCE y PSU. Se estipula sí que, para el efecto, debe seleccionar para séptimo año un número mínimo de 80 alumnos con capacidades necesarias que puedan alcanzar estas metas cuando les corresponda rendir estas pruebas. Se estima que, para el 2011, 2100 sean los alumnos que ingresarán a los llamados liceos de excelencia, que para iniciar el programa serán 25 establecimientos, de los cuales el 70% serán escogidos por exámenes de admisión, que se tomarán en los propios colegios  y 30% serán seleccionados mediante un sistema de sorteo. El ministro Lavín explicó que en dicho sorteo podrán participar todos los niños de Sexto Básico de las comunas donde haya un liceo de excelencia cuyas familias quieran que su hijo ingrese al Liceo de Excelencia.

A la vez, los liceos de nuestro país serán clasificados con los colores del semáforo: verde amarillo y rojo que irán desde los mejores hasta los peores colegios, según resultado del SIMCE.  Medida altamente segregadora, que en vez de general igualdades y limar diferencias, solo aumentará las diferencias sociales, ya que no toma en cuenta muchas aspectos  como el tipo de establecimiento( municipal, particular subvencionado o particular) que se pueden establecer diferentes mecanismos para seleccionar a sus alumnos, y quedarse con los «mejores», como el caso de los particular subvencionados y privados. En cambio, los municipales solo podrán optar por aquellos que postulen. También que esta medida se basa en los resultados obtenidos por los alumnos en solo una prueba, dejandoles toda la responsabilidad a los directivos de los colegios, sin ver más a fondo los problemas de nuestro sistema educativo.

Nuestra opinión al respecto es que, más allá de mejorar la calidad de la educación, sólo aumentará la brecha de la desigualdad de la educación, ya que no todos los niños podrán acceder a los liceos de excelencia, por ejemplo, porque sólo algunos (se estima que el 5%) podrán entrar a estos colegios de excelencia. Y con respecto a los otros anuncios, no alcanzan para llegar a ser una “revolución”, como es llamada, ya que una revolución, sobre todo en materia educativa, tiene que promover cambios profundos tendientes al mejoramiento de la calidad de nuestra educación, proyectada a través del tiempo y que involucre a todos los actores de la sociedad. Pero estos son solo las medidas que se han tratado de implementar durante este primer año de gobierno.



Bibliografias

Politicas Publicas en Chile :

http://www.bcn.cl/carpeta_temas/temas_portada.2006-07-25.7747914711

Reformas educativas en Chile:

http://educatina.blogspot.com/

Ley Orgánica Institucional de Enseñanza:

http://es.wikipedia.org/wiki/Ley_Org%C3%A1nica_Constitucional_de_Ense%C3%B1anza

Proyecto de Ley General de Educación:

http://www.educarchile.cl/Portal.Base/Web/VerContenido.aspx?ID=132837

Ley general de Educación. Más estado y menos mercado:

http://es.scribd.com/doc/3388185/POWER-POINT-HISTORIA-DE-LA-EDUCACION-EN-CHILE-FIN-AL-LUCRO-MAYO-2008

El Estado y el Instituto Pedagogico:

http://www.umce.cl/revistas/intramuros/intramuros_n10_a06.html

Chile, una larga escuela:

http://www.nuestro.cl/opinion/columnas/educacion1.htm

Historia de la Educación Chilena:

http://www.slideshare.net/periodicosien/historia-de-la-educacion-chilena-pdf

Joaquin Lavin y los desafios del cambio educacional :

http://mt.educarchile.cl/MT/jjbrunner/archives/2010/02/joaquin_lavin_y.html

Plan de integración educacional :

 http://www.estrellaarica.cl/site/edic/20040714005927/pags/20040714013151.html